No es un secreto para nadie que este virus vino a generar cambios importantes a nivel mundial, en todas las magnitudes que uno pudiera imaginarse. La pandemia de Covid-19 nos lleva a replantear muchos aspectos de nuestras vidas y al mismo tiempo genera mucha ansiedad, angustia e incertidumbre y estos síntomas se acentúan mucho más si estamos en un proceso de ser madres o si deseamos iniciar un tratamiento de reproducción asistida. 

El desafío que hoy todos tenemos es poder tomar las decisiones más adecuadas, para ello es necesario contemplarse ciertos puntos como:

-       Ocuparse del presente y no del pasado que ya fue, ni del futuro que aún no lo es. La ansiedad y la angustia se manifiestan cuando nuestros pensamientos se sumergen en la búsqueda de respuestas o explicaciones del por qué han ocurrido o no dichas situaciones.

-       Tener paciencia: esto radica en la profunda confianza de que esto va a pasar y además  confiar de que hay un bien mayor, que todo esto nos lleva a una oportunidad de crecimiento.

-       Es necesario armarse una rutina y al mismo tiempo poder ser flexible con la misma.

-       Poder realizar diferentes tipos de ejercicios como los físicos, meditación o respiración, hidratarse y alimentarse saludablemente.

-       Acortar el tiempo de estar conectado a las noticias y a las redes, debido a que esto produce más estrés que tranquilidad.

-       Lee y escribe: es un estupendo momento para viajar a otros mundos a través de la lectura.

Para lograrlo es necesario que empecemos a ocuparnos del hoy. Y para ello desde Neolife queremos brindarte la tranquilad y el cuidado que necesites para aclarar todas tus dudas, inquietudes y preguntas que tengas con respecto a postergar o no tu tratamiento ante esta situación del coronavirus.

Tomate este tiempo para ocuparte de vos, de aprender a conocer y a escuchar tu cuerpo, en poder comprender lo que necesitas y sobre todo empezar a eliminar todo aquello que ya no es parte del presente y que hoy te limita y te impide perseguir tus sueños.

“Cuando la tormenta pase y se amansen los caminos y seamos sobrevivientes de un naufragio colectivo. Con el corazón lloroso y el destino bendecido nos sentiremos dichosos tan solo por estar vivos. Y le daremos un abrazo al primer desconocido y alabaremos la suerte de conservar un amigo.

Y entonces recordaremos todo aquello que perdimos y de una vez aprenderemos todo lo que no aprendimos”. (Fragmento del poema de Alexis Valdés).